martes, 4 de mayo de 2010

3 HISTORIAS

HISTORIA (1)

MIRANDO ATRÁS, RECUERDO AQUELLOS SIN SABORES DE UN CAMINO DE APARIENCIA LEJANO, PERO DE CIERTA CERCANÍA. NO CONSIGO RECORDAR MI JUVENTUD, NO CONSIGO COMPRENDER QUE SUCEDIÓ, PARECE COMO SI PARTE DE MI VIDA HUBIERA DESAPARECIDO, NOTO UN VACÍO EMOCIONAL, COMO SI TODO HUBIERA SIDO UN SUEÑO. SUPONGO QUE CUANDO MORIMOS ES ALGO PARECIDO, LA GENTE NOTA COMO SI ALGO QUE DURANTE AÑOS HA ESTADO A NUESTRO LADO, EN UNA MILÉSIMA DE SEGUNDO DESAPARECE PARA SIEMPRE, POR ELLO, ES TAN REAL AQUELLA FRASE “QUE LA GENTE SE MANTIENE VIVA GRACIAS A NUESTROS RECUERDOS”, ¡Y QUE ME GUSTARÍA MANTENER VIVA ESA LLAMA!, ESE RECUERDO, QUE ME GUSTARÍA PENSAR QUE DENTRO DE LA CRUDA REALIDAD QUE RESUENA EN NUESTRO PECHO, ES FELIZ, HA CONSEGUIDO SUS OBJETIVOS, HA LLEGADO A SER AQUELLO QUE UN DÍA SE PROPUSO, QUE A CONOCIDO EL AMOR DE SU VIDA, QUE SE ENCUENTRA BIEN CON ELLA MISMA, QUE ME GUSTARÍA QUE TODO FUERA ASÍ. SUPONGO QUE MI YO, MI EGO PERSONAL, NECESITA NOTAR ESO, PARA REALMENTE SENTIRSE COMPLETO, PARA TENER LA SENSACIÓN DE QUE ESE CAMINO NO HA SIDO EN VANO, QUE ESE CAMINO ME HA SERVIDO PARA FACILITAR EL ACCESO A OTRAS PERSONAS, QUE ME APRECIAN COMO SOY, CON VIRTUDES Y DEFECTOS, QUE SE MERECEN QUE ME ENTREGUE EN CUERPO Y ALMA, QUE NO SE MERECEN VERME DERRAMAR LÁGRIMAS CUANDO POR FIN SOY “FELIZ”, O AL MENOS, ES LO MÁS CERCA QUE HE ESTADO DE ELLA DESDE HACE MUCHO TIEMPO, Y POR ELLO, PARA ELLO, YA PUEDO SALIR CON LA CABEZA ALTA, UNA SONRISA, Y LA TRANQUILIDAD DE LAS COSAS BIEN HECHAS, SÓLO MIRANDO A UN LADO, ESPERANDO QUE LLEGUE EL MOMENTO, EN QUE TODO VAYA BIEN, QUE NO HAYAN MÁS LÁGRIMAS, NI MÁS RENCORES, SÓLO DISFRUTAR DE LAS PERSONAS QUE TENGO A MI LADO, QUE HAN APOSTADO POR UNA PERSONA DESCONOCIDA PARA TODOS, PERO NO PARA MI.

GRACIAS POR APOSTAR POR MÍ.


HISTORIA (2)

Si algún día pudiera dedicar una canción, tuviera el talento necesario para escribir unas melodiosas letras musicales, donde la opción de escribirle a alguien apareciera, no tendría dudas de que mis primeras palabras se escribirían en grande, diciendo GRACIAS.


Han sido ellos, los que de la nada crearon un imperio de amor por sus hijos, a esos, a los que nunca les ha faltado nada, aunque ellos, trabajaran hasta el alba pensando nada más que en ver la manera de sacarlos adelante sin que ellos notaran la mínima desesperación en sus rostros; para que crecieran felices, alegres,… pero sobre todo dentro de una educación modélica para unas personas que no tuvieron la mínima opción de conocer que era un colegio.

ÉL desde los ochos años manteniendo a sus hermanos, ELLA desde pequeña añorando la pérdida de su padre, viviendo ambos en la más auténtica pobreza, pero con las fuerzas necesarias para vivir, soñar, reír, pensando que algún día serían feliz.

Y sé, que aunque la vida le pegó un nuevo traspiés, donde estuvieron a punto de morir por la imprudencia de unos hombres sin almas; pero el vivir por sus hijos, por sus nietos, por aquello que tanto habían luchado para ver feliz les hizo retornar a la tierra, diciendo “NO” todavía, que su hora no habían llegado que tenían que ver a su hijos una vez más.

Ese hijo que tuvo la “suerte” de ser quien los sacara de aquel amasijos de hierro en el que se convirtió aquel coche que era su único medio de vida, por aquellos hijos que noche tras noche vagaban por un hospital desierto con los únicos sonidos escalofriantes de quien luchaban por vivir, dejando a su familia apartadas durante tiempo, por el hecho de tener la esperanza de ver a sus padres de nuevo entre ellos.

Sólo ustedes, sabéis el esfuerzo hecho, cuando sin poder, aún convalecientes, tras innumerable operaciones, vuestro único empeño era en verme terminar mi estudios, no dejándome abandonar ni un segundo aquella silla, aquella mesa, que durante años nos acompañó, para ver un sueño, unas lágrimas de mis padres al verme terminar, al sentirse un poco más satisfechos, al ver que su esfuerzo no era en vano, al ver que su sacrificio tenían recompensa.

Por ello, aunque nunca tenga la oportunidad de escribiros una canción, ni un poema de amor y muchas veces parezca que nada sucedió, donde el único recuerdo de aquello es la muleta que utilizas como bastón; quiero que sepáis, que podéis ser felices que habéis logrado sin tener nada lo que gente con mucho no podrán decir, que pase lo que pase siempre estarán vuestros hijos, siempre estarán vuestros nietos, pero sobre todo siempre, siempre, siempre… podré gritar al cielo y poder darle las GRACIAS por haber tenido la suerte de teneros.



"A MIS PADRES"






Después de horas,
sigo en silencio escribiendo,
sigo esperando que ella aparezca
que me alegre con su sonrisa
esa sonrisa que nunca quita
esa sonrisa que me da la vida.

Es esa “nina” que me ha cautivado
me ha ayudado
a apreciar lo que tengo a mi lado,
a valorar
todo aquello
que aparté en el pasado,
dándome la oportunidad de cambiarlo.

Es por ello, que los minutos
se me hacen eternos
esperando su llegada,
el momento para poder abrazarla,
esos brazos sinceros que me acogieron
cuando más los necesitaba,
esos besos con tanta dulzura
que me hiceron olvidar
tan tristes amarguras.

A ella, darle las gracias
por hacer sentirme a gusto de nuevo,
por conseguir que mis risas
no sean sólo fruto
de chistes y anécdotas
de noches de fiesta y mal gusto,
que sean tan sinceras
como es ella
tan alegre como la primavera
tan encantadora,
que con una sola palabra
me llega a lo más dentro del alma.

Mi corazón ha cambiado
ahora late con esperanza
de sentir con fuerzas
que todo cambia
que mis llantos se convirtieron
en diamantes
que mi pena en alegría
y que mi vida ha dado
un cambio
y eso, no lo dudes
te lo debo a ti

“ME ENCANTAS”.